sábado, 16 de noviembre de 2013

La Experiencia Nostálgica

Caminamos un rato por la oscuridad infinita. Tuve valor para preguntarle que el paseo me estaba aburriendo.
- Sonic... - digo un poco miedosa.
- ¿Sí, mi Rose?
- Emmm... este paseo... es un poco aburrido...
- ¿No te gusta?
- Bueno... es que... está todo oscuro y no se ve nada...
- Ah, si es por eso, puedo cambiarlo.
- ¿Cómo?
- Te llevaré a un lugar donde te va a gustar.
- Vale...

Segundos después vi una luz difusa a lo lejos.
- Allí es - señala a esa luz.

Seguimos caminando y al llegar todo lo de nuestro  alrededor cambió. Un paisaje articifial se extendía a nuestro alrededor. Luces, metales, tubos, etc. había de todo. Además de eso, me resultaba todo muy familiar, conocía ese lugar, era imposible de olvidar.
- Esto... esto es...
- Sí, mi dulce Rose, es "Collion Chaos" donde... - se pausa.
- ...donde conocí y me enamoré de Sonic - seguí yo con voz risueña.

Miraba alrededor, asombrada por el maravilloso paisaje, hacía años que no había vuelto a ver este lugar, lo adoro. Sonic se pone delante mío disfrutando de mi felicidad.
-Me alegro que te guste.

No pude evitar dejar escapar estas palabras:
- Gracias por haberme llevado a este sitio, es muy nostálgico pero me hace feliz.

Se acerca a mí y me acaricia la mejilla con sus dedos.
- Todo para que mi dulce y bella rosa sea feliz.

Ese tal "Sonic maligno" tiene también su encanto aunque a su manera. Me coge de las manos suavemente, le miro sorprendida.
- Amy ¿Querrías vivir de nuevo la experiencia?
- ¿La-la experiencia?
- Sí
- ¿Qué- qué experiencia?
- La de cuando nos conocimos.
- No te entiendo, Sonic.
- Cuando estabas conmigo, persiguiéndome - me acaricia las manos - y dando un paseo, hasta que Metal Sonic te raptó y yo tuve que ir a rescatarte, viajando por el tiempo y pasando zonas hasta llegar a tí.

Sabía a lo que se refería, en ese momento me demostró su valentía y coraje al rescatarme. Me habría gustado haberle dicho que le amaba en el momento en el que me rescató, pero me entró la timidez, no sé por qué.
- Bueno... si es así... - no sabía si afirmar o negar pero Sonic me quitó la duda.
- Por supuesto que sí te gustaría, no me rechazarías esta ocasión ¿verdad?
- Emm...
- Bien así será.

Caminamos juntos durante un buen rato, cogidos de la mano, sin que me pudiera soltar en ningún momento, me resultaba muy incómodo estar pegado a él durante todo el tiempo, hasta que me cansé.
 - Sonic ¿Podemos descansar? estoy agotada.
- Claro mi dulce rosa - me suelta la mano.

Cuando estaba a punto de sentarme en una piedra que había cerca, oí un zumbido y justo por detrás me agarró de los brazos algo frío y metalizado. Grité y me di la vuelta.
- ¡Metal Sonic!

Me agarró volando y me alejó de Sonic, que nos seguía rápidamente. Pienso que, esperaría a que estuviera desprevenida, que le resultó, claro. Metal Sonic aceleró la marcha y perdimos a Sonic de vista en unos segundos.
- Metal Sonic ¿Qué haces aquí? - le pregunto.
- Solo recibo órdenes - me contesta tan frío.
- ¿De quién? ¿De Eggman?
- Afirmativo, porque Sonic EXE se lo mandó a mi amo.
- ¿Sonic EXE? ¿Quién es... Sonic EXE? - me quedé bloqueada.
- Todo será explicado cuando lleguemos a "Little Planet"



Justamente a lo lejos estaba "Little Planet" ese pequeño planeta que siempre está constantemente viajando y que Eggman lo enganchó y lo robotizó para su imperio. Justamente está en ese mismo estado. Llegamos a "Little Planet" y entramos a la base de Eggman. En ese momento, estaba dando sus últimos ajustes a una máquina que se iba a enfrentar contra Sonic, justo como yo recordaba, pero lo que pasó a continuación no fue lo mismo que ahora.

 "En el pasado, Metal Sonic me inmovilizó sujetándome de los brazos mientras Eggman se paraba delante mío y me miraba con maldad, yo en ese momento estaba muy asustada.
- ¡Jojojó! mira quién tenemos aquí, si es la nueva amiguita de Sonic - decía mientras se acariciaba el bigote.

Yo temblaba.
- Serás un buen cebo para ese erizo despreciable. Metal Sonic, átala a lo alto de ese tubo para que no se escape.
- Sí, mi amo - afirmó su nueva mano derecha.

Mientras Metal Sonic me llevaba hacia arriba y me ataba, yo gritaba desesperada.
- ¡No! ¡Déjenme! ¡Soltadme! ¡Déjenme irme, por favor!

Eggman se reía al verme sufrir desesperada ahí arriba. Veía como cambiaban de turno durante el tiempo que estuve allí atada, estaban luchando contra Sonic. Hasta que Sonic derrotó a Metal Sonic en una carrera, me rescató y frustó los planes de Eggman."

Pero eso fue en el pasado verdadero, ahora solo estaba asustada de Sonic no de Eggman. Aproveché de abrazar a Metal Sonic y darle las gracias.
- Metal Sonic - abrazándole fuertemente - gracias por alejarme de ese Sonic maligno.
- No era un cumplido.
- Pero gracias igualmente.
- ... de nada.

Eggman se acerca hacia mí.
-Bueno, bueno, ya estás aquí señoritinga Amy Rose - dice burlándose.
- No me llames así - me enfado.
- Supongo que ya habrás conocido a...
- ¿Al Sonic maligno, perverso y espeluznante? Sí, lo he conocido, y ha sido muy desagradable y espantoso.
- Bueno, entonces no tengo nada más que añadir.
- ¿Es verdad que Sonic te está controlando a ti también?
- ¡He! A mí no me gusta que me controle nadie, pero ese erizo endemoniado puede hacer lo que le plazca por aquí, ya que si no está contento su majestad malvada, te tortura hasta la muerte o solo te tortura, cosa que pude ver con mis propios ojos a uno de esos animalitos que andan por este lugar. Francamente, me dio grima verlo, eso fue el ejemplo de lo que me haría a mí si no le obedecía, claramente, elegí obedecerle, para luego en algún momento cuando todo esto acabe, destruir por una vez a Sonic.

Típico de Eggman acabar con esos fines, pero la idea de matar o torturar a esos pobres e indefensos animales me horrorizaba ¿Cómo puede ser tan cruel y perverso? A veces no tiene sentimientos ni corazón.
- Bueno, ya veo que los grandes seres malignos, también tienen amante - dice.
- Sí, pero por la fuerza - me pauso para no llorar - odio que me bese con fuerza, con brusquedad... es- es un bruto, me hace daño cuando me agarra de los brazos o de la cara - me pauso de nuevo y me tapo la cara con una mano y agacho la cabeza.

Eggman se da cuenta y se queda en silencio, sé que quiere apiadarse de mí y consolarme pero no se atreve solo para conservar su reputación.
- Y-y-y... - se me cae una lágrima pero me la seco rápidamente - es un asqueroso y pervertido...

Sabía que Eggman se estaba poniendo incómodo por el ambiente que estaba dando, así que dejo el tema.
- Dejaré que se te pase la depresión antes de atarte. Metal Sonic, acompáñala hasta el tubo - dice con normaleza.
- Sí, mi amo.

Caminamos hasta el tubo donde me atarían después. Me senté apoyada en él, con las rodillas junto a mi cara, y rodeé mis piernas con mis brazos. No pude reprimir más el llanto, y rompí a lágrimas. Quería soltar toda la tristeza y miedo que tenía concentrado en mi cuerpo y corazón. Miraba a Eggman sin que él se diera cuenta, él también me estaba mirando de espaldas, veía como lloraba, ponía una cara triste al verme, sé que yo le daba pena... pero qué podría hacer él. Miro a mi lado y ahí está Metal Sonic, intacto e indiferente, se supone que vigilándome pero no me miraba, miraba al frente donde está Eggman, esperando a recibir órdenes.

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